King of Cool!

¡Ha salido el sol! Hace un día estupendo, y sería una pena desperdiciarlo metido en un coche. Aunque fuera uno como el Lyonheart K. ¡Pero no os preocupéis amantes del tweed y el té de las o'clock! Si os gustó el rollo jersey de cuello vuelto petado y pitillos aplasta paquetes, aquí os traigo a su prima lejana de dos ruedas. La Triumph Bonneville.

Triumph Bonneville T100

Bueno, esta moto no es por el aniversario de una antigualla y algo así, de hecho, más que una moto es un saga. Y es que la marca británica lleva fabricándola desde 1959, con un par de pausas eso sí, pero son unos pocos años ya.

¿Lo que mola de esta moto? Pues vamos por partes. Por fuera mola todo, no me digáis que no. Es sesentera, suena como The Kinks y con ese asiento plano y los dos colores tiene un toque vintage único. Además, mucho más importante, Steve McQueen tenia una (incluso ha salido un modelo con su nombre este año). Y a ese tipo no le llamaban "The King of Cool" por nada. El rubio molaba, y sabía lo que molaba. Por dentro, es una moto de las que aguantan un bombardeo. Monta un motor de 865c.c. de cuatro tiempos que, si no le apretamos mucho, consume relativamente poco.

El actor estadounidense en su Bonneville

¿Lo que no mola de esta moto? Para variar, como casi todas las que saco aquí, el precio. Son  9000€ aprox. (dependiendo de pintura y tal) que, si bien es más barata que las Harleys que os mostré, sigue siendo un precio altito para una moto.

Por concluir con algo, ¿me la compraba? Sí ¿Antes que la Seventy-Two? Eso ya dependerá de si sois más de Janis Joplin o de The Beatles, aunque también es verdad que son 2000€ menos.