lunes, 20 de febrero de 2012

C. C. Riders

Curioso este término, el del título, "C. C. Riders" o "See See Riders". Al parecer se acuño por principios del siglo pasado y, aquí en España, es lo que llamaríamos un eufemismo como un templo. La expresioncilla se usa para referirse a las mujeres de "sexualidad liberada". Si aún no lo tenéis muy claro, proviene de la expresión "easy rider" que se aplicaba a los caballos que se dejaban montar con facilidad ¡y además daba gusto hacerlo! Pero ojo, porque además de a los caballos facilones, también se le aplicaba a los buenos jinetes.

Y es que la cosa va hoy de mujeres de sexualidad liberada y buenos jinetes, casi a partes iguales, con la película que os traigo: Hell Ride.

Hell Ride (2008)

Como podéis ver en el póster de la película, viene presentada por Quentin Tarantino, uno de mis directores favoritos (como podréis ir viendo a lo largo del blog). ¿Una película de Tarantino que ni os sonará a muchos? ¡No puede ser! No es que sea precisamente de los de sacar diez cintas al año. Efectivamente, no es, porque el "sólo" la produce, y ese entrecomillado casi se me queda corto. La película huele a Tarantino desde el minuto cero hasta que se acaban los créditos, desde la BSO, hasta los diálogos intrincados y los delincuentes sospechosamente filosofales y cultos. En cambio, la dirección, así como el guión, corren a cargo de un desconocido Larry Bishop, a quien le debió saber a poco y decidió protagonizarla también, aunque tengo mis serias sospechas acerca de su papel como actor que más adelante expondré.

Pero entremos ya en chicha. El argumento de la película gira alrededor de dos bandas de moteros en mitad del desierto, sus venganzas, odios y traiciones que, en alguna ocasión, se remontan hasta tres décadas en el tiempo. ¿En que época pasa todo esto? Pues primer gran aspecto de la película. Si bien es cierto que, echando cuentas y tal, podemos averiguar cuando se desarrolla la trama de la película, gracias a los flashbacks principalmente, servidor os aconseja que lo dejéis pasar. Podéis disfrutar de la hora y media de película y al final pensar "¿esto era ahora o en los 70... o en los 80?". Es lo bueno del desierto, que su arquitectura no da muchas pistas. Un segundo consejo que os daría (si, hoy estoy esplendido) es que la vierais en VOS. Particularmente creo que todas las películas deben verse así, pero es que cuando hablas de una película ambientada en el desierto fronterizo... ¡pues no puedes perderte los "espanglicismos"! Desde el nombre de los protagonistas, "Pistolero" y "Comanche", hasta los típicos "amigou" que le dan un genial toque Texicano al film. Pero como decía, la película nos acerca a los "Victors", banda liderada por "Pistolero", y al retorno de su banda rival, los "666'ers", sumergiéndonos  en una serie de acontecimientos con origen en una antigua rivalidad, la cual iréis descubriendo poco a poco a través de una serie de flashbacks.

Los tres protagonistas en formación motera

Dediquemos un pequeño espacio también a la interpretación. Lo cierto es que no hay nada brillante que destacar, pero tampoco desdeñable, y menos considerando el tipo de película que es. Eso sí, el plantel de nombres conocidos no es escaso. Como ya comenté, el papel protagonista se lo queda Larry Bishop, a quien los más observadores podrán recordar como el dueño de un bar en Kill Bill vol.2, de hecho, era el jefe de Michael Madsen. Y por aquello de no cambiar mucho, Michael Madsen seguirá estando bajo su mando aquí, esta vez como "The Gent" uno de los lugartenientes de "Pistolero". A su lado montará Eric Balfour (Comanche), otro de los desconocidos en el largometraje. Pero ahora entramos en nombres que resuenan más. Como principal vieja gloria, y casi cuarenta años después de Easy Rider, volvemos a ver a Dennis Hopper en lo alto de una burra. Pero el bando de los "malos" (aquí nadie es bueno en verdad) tampoco se queda atrás. Sus filas están comandadas por Vinnie Jones y el ya fallecido (en circunstancias que merecen casi una entrada propia) David Carradine.

Os he explicado de que va, quien la protagoniza, etc. pero aún no he dado ni un motivo para verla. Pues es la película más acorde con este blog que pueda existir. Todo en esta película rezuma virilidad al estilo old school. ¿¡Por donde empezar!? Las motos son una maravilla de museo, desde Indians con más años que sus jinetes hasta bobbers customizadas en extremo,  pasando por una Indian Chief, nuevecita, en azul cielo que quita el hipo. Las armas que llevan son revolvers de los de toda la vida, de los que te hacen duro solo por llevarlos, como Harry El Sucio o el Manco. La BSO, encabezada por Jenny take a ride, la cual da título a esta entrada, ambienta de forma soberbia. Las mujeres, con amplia y poco vestida representación, son diametralmente opuestas a las Top Model, vamos, lo que nos gusta los hombres, todo curvas y carne. 

Aquí podemos observar al director Larry Bishop sufriendo por interpretar a "Pistolero"

En resumen: tiene violencia, sexo explicito (casi todo para Bishop, de ahí mis sospechas sobre su papel en la película y es que el que parte y reparte...), motos increíbles, buena música y buenos diálogos. ¡Esta película lo tiene todo!

Por último señalaré algún que otro contra, no todo podían ser pros. La experiencia personal me dice que muy pocas mujeres valoran esta película, ahí ya verlo como queráis, si sois de los de poneros peli en pareja, lo siento, si tenéis, en cambio, un rato para beberos unas cerves con whisky y vuestros amigos, enhorabuena. Además tengo que reconocer que, objetivamente, no es que sea una obra maestra del cine, es lo que es, una Mannish Film en toda regla, y no le pidáis más.

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